
El pasado lunes 7 de septiembre, de 16.30 a 18.00, asistimos en FIDE a la primera sesión online del Foro de Energía y Regulación en este nuevo curso 2020 – 2021.
La sesión estuvo moderada por Hermenegildo Altozano, Socio de Bird & Bird y miembro del Consejo Académico de Fide, y codirector del Foro junto a Mariano Bacigalupo, Profesor Titular de Derecho Administrativo (UNED), miembro de la Sala de Recurso de la Agencia Europea de Cooperación de los Reguladores de la Energía (ACER) y miembro del Consejo Académico de Fide, y Luis Miguel Palancar, Structured & Project Finance de BBVA.
Participaron como ponentes Joan Groizard, Director General IDEA y Rocío Sicre, Country Manager Spain en EDP.
La sesión versó sobre el Real Decreto de régimen económico de las energías renovables, y abrió el debate Joan Groizard.
El sector energético y el país en su conjunto se encuentran en un momento clave, tanto por el marco normativo internacional y europeo en materia de energía y lucha contra el cambio climático, con el objetivo de neutralidad climática para 2050 sobre la mesa, como por la necesidad de activar en el corto plazo un proceso de reconstrucción económica que, según la evidencia, debe basarse en inversiones “verdes” si busca maximizar el retorno en actividad y empleo a corto plazo, a la vez que generar actividad compatible con los objetivos a medio y largo plazo.
A su vez, las energías renovables han visto una enorme evolución tecnológica en los últimos años, que en el caso de las tecnologías maduras permite que éstas sean la forma más económica de generar electricidad. Para garantizar la inversión en renovables en un mercado no diseñado, a priori, para tecnologías con elevada inversión inicial y bajos costes operativos como son las renovables, es necesario un marco que aporte previsibilidad en los ingresos y certidumbre en el medio plazo.
Por ello, se propone un nuevo marco de subastas que permite anticipar al consumidor los ahorros en la factura energética derivados de los costes de las renovables modernas, que incorpora diversos mecanismos de control para asegurar una adecuada competencia, minimizar los comportamientos que distorsionen el mercado y que busca, además, aprovechar el potencial efecto tractor sobre toda la cadena de valor industrial que suponen las renovables en nuestro país.
En todo caso, el Régimen Económico de las Energías Renovables se encuentra todavía en fase de desarrollo normativo, por lo que los informes preceptivos y las aportaciones de los distintos sectores pueden introducir mejoras y matices a lo descrito.
A continuación, Rocío Sicre hace una exposición sobre el impacto económico de las energías renovables, y sobre el PNIEC, de acuerdo con el cual se prevé, para el año 2030, una potencia total instalada en el sector eléctrico de 161 GW de los que 50 GW serán energía eólica; 39 GW solar fotovoltaica; 27 GW ciclos combinados de gas; 16 GW hidráulica; 9,5 GW bombeo; 7 GW solar termoeléctrica; y 3 GW nuclear, además de 2.5 GW de almacenamiento, lo que permitirá alcanzar un 74% de generación renovable.
El coste de las renovables a día de hoy (en términos de LCOE) es el menor de todas las alternativas de generación y se espera que ambas tecnologías continúen bajando sus costes. Como resultado, desde el punto de vista del consumidor, integrar renovables permitiría tener un coste de la electricidad menor. Esto es especialmente relevante para los grandes consumidores, ya que podría ayudar a bajar su factura de la electricidad, a la vez que reducir su huella en carbono. De este modo, las renovables contribuyen a mejorar la competitividad de las industrias implantadas en España vs otros países y, en última instancia, atraer nuevas inversiones industriales o evitar la fuga de las existentes.
Sin embargo, para que esto se cumpla es necesario que las renovables cuenten con un marco regulatorio y de ingresos estable:
- Por una parte, se debe contar con un calendario de subastas con visibilidad suficiente. El RDL 23/2020 establece las bases para las subastas, lo cual es muy positivo para el sector, pero es fundamental que además contemos con un calendario que permita tanto a fabricantes planificar su cadena productiva como a los desarrolladores su cartera de proyectos.
- Por otra parte, el régimen remuneratorio otorgado debe permitir tener visibilidad sobre los ingresos (un CfD, como recomendado por las guidelines europeas, es lo preferible). De este modo, se puede acceder a unas buenas condiciones de financiación que resultan en un precio menor y por tanto en un ahorro mayor para los consumidores.
Por otro lado, las renovables contribuyen significativamente a la economía. Según el último anuario de la AEE, la eólica en España contribuye a 0.3% del PIB con 3,584 M€ y 24,000 personas empleadas, siendo el tercer país exportador del mundo, solo por detrás de Dinamarca y Alemania. Con las instalaciones de eólica que se prevén de aquí al final de la década, no sólo en España sino también en el resto de Europa, casi 130 GW según los planes nacionales, el sector eólico podrá seguir contribuyendo al desarrollo económico. Además cabe destacar que, en la coyuntura económica actual, la eólica y las renovables en general, por sus cortos tiempos de construcción, si cuentan con el marco regulatoria adecuado (acceso y conexión, subastas, etc.) pueden contribuir de forma sustancial a la reactivación de la economía.
Además, la integración de RES a los niveles definidos en el PNIEC hacen que sea necesario el desarrollo de otras tecnologías (baterías, hidrógeno, etc.) que todavía están en una fase más prematura pero que podrían suponer un nuevo sector industrial tal y como vemos la eólica a día de hoy.
Conoce todas las actividades del Foro de Energía y Regulación de Fide.