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«El Futuro de las Profesiones»

Como dijo John Ruskin en su célebre conferencia «De los tesoros de los Reyes» hace más de un siglo, hay libros buenos para el momento y libros buenos para siempre; libros malos para el momento y malos para siempre. El último libro de Richard Susskind y su hijo Daniel Susskind El futuro de las profesiones: cómo la tecnología transformará el trabajo de los expertos humanos  es desde mi modesto punto de vista, un buen libro para el momento. 

Ruskin consideraba que estos buenos libros del momento eran, simplemente, la conversación útil o agradable con una persona con la cual no podríamos hablar de otro modo, útiles porque nos dicen lo que necesitamos saber y a menudo agradables como puede serlo la conversación del amigo inteligente que se tiene al lado. Si bien Ruskin consideraba que no debíamos permitir que esos libros del momento usurpasen el lugar de los libros verdaderos ya que, hablando en puridad, no son realmente libros sino cartas o diarios bien impresos, me atrevo a recomendar su lectura a todos los «profesionales» que siguen el blog ya que este libro, desde luego, va más allá de una mera descripción de los cambios que la tecnología está implicando en las distintas profesiones y plantea un estimulante y provocador cuestionamiento de su actual status quo que, como mínimo, generará si bien no una inmediata aceptación sí tal vez un cierto escepticismo y rechazo que serán interesantes bases para la reflexión futura. 

El libro, se divide en siete capítulos agrupados en tres partes (Cambio, Teoría -de ese Cambio- e Implicaciones). Los Susskind comienzan su libro con una introducción de los orígenes históricos de lo que llamamos «profesiones colegiadas» y del gran acuerdo social por el que se les otorgó un estatuto privilegiado y pseudo-monopolio a los profesionales ante el servicio que prestan a la sociedad y el conocimiento y experiencia que está en manos de sus miembros que hace que todo el mundo acepte que un «don nadie» no pueda llevar a cabo una operación quirúrgica o que ese «don nadie» pueda defenderle ante un tribunal, –acuerdo social que en España hace que la propia Constitución establezca reserva de Ley para el ejercicio de las profesiones tituladas en su artículo 36- . 

Tras esos antecedentes, los Susskind dedican el segundo capítulo del libro a ofrecernos una muestra de los cambios que en estos primeros lustros del S.XXI la tecnología está generando en distintos ámbitos profesionales en el sector de la educación, la salud, derecho, periodismo, arquitectura, consultoría estratégica, auditoría e, incluso, en los servicios pastorales de distintos credos religiosos. Por ejemplo, en el ámbito de la salud, se repasan las últimas tendencias en mobile health (mHealth), en telemedicina, en las nuevas aplicaciones móviles para pacientes (como PatientsLikeMe) y doctores (como «Epocrates») o los últimos avances en robótica e inteligencia artificial en el ámbito médico y, así, en cada sector objeto de análisis. 

Así, sector profesional por sector profesional, los Susskind nos empiezan a abrir los ojos a los cambios que ya hoy la tecnología está teniendo para llegar, en el tercer capítulo, a una sistematización de las tendencias que se están produciendo que resumen en ocho puntos: el final de una era; transformación tecnológica; aparición de nuevas competencias y capacidades; reconfiguración del trabajo profesional; nuevos modelos productivos y de trabajo; ampliación de la oferta para los usuarios; amenazas para las firmas profesionales y, por último, desmitificación de las profesiones. 

Tras esta primera parte, sumamente descriptiva, en la segunda parte del libro los Susskind teorizan sobre las causas de estos cambios y se aventuran a realizar predicciones de cómo el «conocimiento» que atesoran los profesionales entendido como «experiencia práctica profesional» cambiará en la forma de ser creado y distribuido mediante distintos modelos que irán desde el tradicional modelo presencial retribuido conforme al tiempo dedicado por el profesional en prestar su servicio (modelo dominante hoy día) a otros como las comunidades de expertos (BetterDoctor en medicina o Axiom Law en derecho); modelos de para-profesionales (enfermeras llevando a cabo tareas que hasta ahora prestaban los médicos con la asistencia de Watson de IBM por ejemplo); modelos de ingeniería de conocimiento (por ejemplo, herramientas de autodiagnóstico médico o preparación automática de declaraciones de impuestos); comunidades de experiencia (tales como PatientsLikeMe en medicina, Edmodo en educación, BeliefNet en ámbito religioso, WikiHouse en arquitectura, Global Voices en periodismo, etc.) hasta llegar, en el otro extremo, a modelos donde las máquinas serán los principales prestadores del servicio profesional. 

En la última parte del libro los Susskind comparten con los lectores las objeciones que, desde el ámbito profesional, se plantean al cambio tales como el fin de la confianza y ética profesional, de las destrezas y habilidades personalizadas, de la interacción personal, empatía, el trabajo bien hecho, etc. frente a las que los Susskind arguyen que (i) no debe confundirse el medio con el fin ya que el rol fundamental del profesional debe ser facilitar conocimiento y experiencia a quien no lo tiene –no se acude al médico o al abogado para tener interacción personal para lo que existen mejores ocasiones sino para que estos den soluciones al problema que se les plantea-,(ii) que el cambio que anticipan permitirá que más personas puedan tener acceso a esos servicios y (iii) que por el hecho de que las máquinas no sean cien por cien perfectas no debe desdeñárselas ya que tampoco los expertos humanos tienen esa perfección. 

Puestas todas la cartas encima de la mesa, el último capítulo del libro titulado «Después de las profesiones» nos invita a imaginar ese mundo en el que no habrá que ir a visitar al doctor en su consulta, al abogado en su despacho o al maestro en el aula en el que se nos plantea el rol que jugarán las máquinas en ese momento y qué servicios profesionales serán todavía necesarios entonces con todas las amenazas –desempleo por la automatización de trabajos- y oportunidades que este nuevo escenario anticipa. 

Una buena lectura para el momento. 

© Javier Fernández-Samaniego, 2016

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Sobre el autor

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Javier Fernández-Samaniego

Socio Director de Samaniego Law, despacho de abogados especializado en resolución de conflictos y derecho de las nuevas tecnologías. Miembro del Consejo Académico de Fide

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